Cataluña reclama en la COP 21 más papel para las regiones en materia climática

El consejero de Territorio y Sostenibilidad de la Generalitat de Cataliña, Santi Vila, ha reclamado más papel para las regiones en materia climática dentro de las Naciones Unidas, en el marco de la Cumbre del Clima de París. Para el consejero, "como se demuestra y acredita, la eficacia de estas políticas va vinculada a la escala y dimensión regional, que es la que realmente incide en la vida de los ciudadanos". También ha dicho que "por razones de eficacia y de reconocimiento político, es absolutamente necesario que, siguiendo lo que las Naciones Unidas continuamente recomiendan, los Estados dejen de secuestrar este tipo de políticas y hagan posible que los que tenemos competencias en movilidad, eficiencia energética o sostenibilidad podamos decir la nuestra y tomar decisiones vinculantes, porque estamos decididos a hacerlo ".

Vila ha dado a conocer los últimos datos disponibles sobre emisiones de CO2 en Cataluña, correspondientes al año 2013. Según estas cifras, Cataluña ha reducido un 8% las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) respecto del año anterior, situándonos en niveles muy similares a los del año 1992. De esta manera, se consolida la tendencia bajista iniciada en 2006, con ocho años consecutivos de descenso después del máximo de 2005, con 59,6 millones de toneladas (MT) de CO2 . En el período 2005-2013, nuestro país ha reducido cerca de un 30% las emisiones.

La reducción más sensible la encontramos en las que se originan en los sectores industriales y en la producción de electricidad con combustibles fósiles. En el resto, la disminución es ligera o se mantiene constante.

Dentro del sector del procesamiento de la energía, las emisiones correspondientes al transporte, que incluyen la aviación civil y el transporte por carretera, ferrocarril y marítimo, han bajado un 28% desde el máximo histórico que se produjo en 2007. Respecto al 2012, las emisiones del sector se han reducido un 1,5%. Después de 5 años de bajada fuerte, en 2013 comienzan a estabilizarse. Los datos de venta de combustible de 2014 hacen pensar que los años de reducción de emisiones de este sector pueden haber terminado.

Las correspondientes a los residuos y a la agricultura también bajan. Lo hacen en torno a un 2% respecto al año anterior, considerándolas relativamente estabilizadas durante los últimos años.

Los objetivos de reducción de emisiones para el año 2020

Cataluña está en disposición de cumplir los objetivos de reducción planteados por la Unión Europea de cara al año 2020. España sin embargo, de acuerdo con Europa, debe reducir para entonces un 10% las emisiones producidas por los sectores considerados difusos (los que no están sometidos a la Directiva de comercio de derechos de emisión) respecto las de 2005. A pesar de que el Estado no ha repartido este esfuerzo de reducción entre las Comunidades Autónomas, la Ley catalana del Cambio Climático, presentada hace unas semanas en Gobierno, plantea un objetivo superior, con una reducción del 15%.

En estos momentos, en Cataluña ya se ha disminuido las emisiones de los sectores difusos respecto al año base alrededor del 20%. Ante el escenario de una posible recuperación económica, lo que en estos momentos parece fácil de lograr no lo será. Habrá, pues, no relajar las políticas climáticas haciendo compatibles los objetivos de crecimiento económico con los de reducción de emisiones.

Posicionamiento de Cataluña en la COP21

El consejero Vila ha querido poner en contexto estos datos, explicando que "afrontamos estos retos con un Estado que no se lo toma en serio. El papel del Estado español se ha caracterizado hasta ahora por su bajo compromiso con una economía baja en carbono, por una política errática en relación a las primas de las renovables y por una actitud centralista y autista al no transponer la Directiva europea relativa a la eficiencia energética ". "La necesidad de afrontar el cambio climático", explicó, "nos interpela hacia el modelo de progreso del futuro: a la antigua, basado en el crecimiento, o en el mero decrecimiento. Negamos esta falsa dicotomía y optamos por un crecimiento sostenible, por la revolución de la eficiencia, vinculando nítidamente la agenda social y ambiental y apostamos por una economía verde. Se trata de crecer diferente, crecer mejor. "

En este sentido, Cataluña es una de las regiones más activas a nivel internacional en materia climática, convencida de que no habrá resultados globales sin estrategias regionales y locales. El nuestro es un territorio pionero en la adopción de objetivos voluntarios y responsables con una serie de herramientas transversales y complementarias para un abordaje integral. Estas alturas ya tiene a punto la Ley del cambio climático, y en marcha los Planes de mitigación del cambio climático, de energía y cambio climático 2020, y de promoción de la biomasa y las estrategias de adaptación al cambio climático y por la renovación energética de edificios.