Finalizan las obras de la tercera fase de la potabilizadora de La Ribera

La consejera de Agricultura, Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Rural de la Generalitat Valenciana, Elena Cebrián, ha recibido el acta de finalización de las obras de la tercera fase de la Estación de Tratamiento de Agua Potable (ETAP) de La Ribera, que han tenido un presupuesto de 17,2 millones de euros. 

Las obras han consistido en la construcción de una red de tuberías de más de 34 km de longitud, que comienzan en el término municipal de Corbera, mediante el enlace con una derivación que se dejó preparada en las instalaciones de la fase anterior, y finalizan en el depósito del Mareny de Barraquetes, ubicado en el término municipal de Sueca. 

Con esta fase se abastece a las poblaciones de Albalat de la Ribera, Benicull, Polinyà de Xúquer, Riola, Fortaleny y Sueca, incluyendo es este último sus poblados marítimos. 

De este modo, se amplia el abastecimiento desde la ETAP de la Ribera que en estos momentos suministra agua de calidad a las poblaciones de, Carcaixent, Corbera, Llaurí, Favara y Cullera, correspondientes a la fase anterior, y Algemesí desde marzo de 2015 por medio de una puesta en servicio anticipada de la obra. 

Se trata de una red de conducciones de fundición dúctil, que comienzan con una tubería arterial de diámetro 500 mm desde el enlace de Corbera hasta la bifurcación en dos ramales de 400 mm de diámetro, uno que discurre en dirección Algemesí y la otro en dirección Sueca. 

El ramal de Algemesí abastece por medio de las correspondientes ramificaciones en Benicull, Albalat, Polinyà y al propio Algemesí, mientras que el ramal de Sueca abastece a Fortaleny, Riola, a la propia Suecament y finalmente a sus poblados marítimos por medio de las conexiones del Mareny de Barraquetes y de la Muntanyeta de los Santos. 

Entre las obras singulares destacan los cruces del río Júcar en Algemesí, en Albalat y Riola, los cuales se han llevado a cabo colgando la tubería de los puentes existentes. 

Las obras también incluyen siete nuevos depósitos construidos en hormigón armado, con una capacidad conjunta superior a 19.000 metros cúbicos. 

Las obras se completan con instalaciones auxiliares (valvulería, ventosas, desagües, caudalímetros, reductoras de presión) ubicadas en las correspondientes arquetas registrables, y que son necesarias para el correcto funcionamiento de las instalaciones.