"Ca na Putxa es una planta de última generación diseñada para adaptarse a los requerimientos futuros"

Entrevista a Montserrat Ruiz Costa, Técnica de Medio Ambiente y representante del Consell Insular de Eivissa en el contrato con la UTE GIREF
"Ca na Putxa es una planta de última generación diseñada para adaptarse a los requerimientos futuros"
"Ca na Putxa es una planta de última generación diseñada para adaptarse a los requerimientos futuros"
02-03-2021

La nueva planta de tratamiento de residuos de Ibiza y Formentera, construida en el Área Ambiental de Ca na Putxa, permitirá dar cumplimiento a la normativa europea en materia de tratamiento de residuos y a los planes director de residuos de las islas, así como mostrarse como un modelo de sostenibilidad y concienciación para la población. En este entrevista hablamos con Montserrat Ruiz Costa, Técnica de Medio Ambiente y representante del Consell Insular de Eivissa en el contrato con la UTE GIREF, sobre esta instalación puntera a nivel nacional.

¿Cuál era la situación previa en la isla antes de la puesta en marcha de la instalación?

Pese a no tener una instalación de tratamiento como la actual, sí se disponia de muchas otras. En 2005 se construyó la Estación de Transferencia de residuos de envases que da servicio a las fracciones de la recogida selectiva municipal para su recepción y expedición a plantas de reciclaje de fuera de la isla. En 2006 el Consell Insular de Eivissa inició una prueba piloto para la gestión diferenciada de los residuos de aparatos eléctricos y electrónicos firmando el primer convenio de las Illes Balears con las entidades representantes de los fabricantes de aparatos eléctricos y electrónicos. Des de entonces disponemos de un centro logístico designado en la isla para recepcionar, clasificar, descontaminar y expedir estos residuos a plantas de reciclaje, consiguiendo unas tasas de recogida excepcionales.  En 2012 se puso en marcha la Red insular de puntos limpios que da respuesta a todos aquellos residuos domiciliarios con unas características especiales de cantidad, peligrosidad, volumen etc. También hay una red de contenedores específicos instalados en las calles para la recogida de téxtiles y aceites vegetales usados. Los residuos de construcción y demolición se gestionan separadamente en canteras privadas autorizadas con proyectos de restauración, incluyendo una de ellas planta de selección de RCDs. Por lo que respecta a las instalaciones de gestión integral de residuos de Ca na Putxa, en 2005 se otorgó al vertedero insular de residuos no peligrosos la autorización ambiental integrada después de ejecutar un proyecto de adecuación para dar cumplimento a la normativa de residuos y finalmente este año 2020 hemos podido inaugurar las plantas de tratamiento.

"Este proyecto se ha diseñado y ejecutado con criterios de sostenibilidad y autosuficiencia".

En rasgos generales, ¿qué caracteriza a este proyecto?

Este proyecto se ha diseñado y ejecutado con criterios de sostenibilidad y autosuficiencia. En la fase de construcción se ha trabajado para minimizar el impacto ambiental con medidas como por ejemplo el aprovechamiento de los áridos de la excavación y el agua depurada para la producción de hormigón, o el saneamiento de una zona donde había residuos del antiguo vertedero.

En la fase de explotación es una instalación autosuficiente por lo que respecta al consumo de energía y agua. Los lixiviados se depuran mediante procesos de ósmosis inversa para obtener agua de calidad que se reutilizará en explotación. Todo el consumo tanto de agua como energía se monitoriza para su control.

"En la fase de explotación es una instalación autosuficiente por lo que respecta al consumo de energía y agua". 

Gracias a la implantación en la isla de Ibiza de la recogida selectiva de materia orgánica y a la buena calidad de los lodos de depuración producidos en la isla, se obtendrá un compost de calidad que podrá aplicarse en las fincas agrícolas de la isla cerrando el ciclo de la materia orgánica y evitando de esta manera una parte de la importación de fertilizantes y enmiendas orgánicas desde la península.

En definitiva, es una planta de última generación diseñada para optimizar la recuperación de materiales, minimizar el rechazo con destino a vertedero y con la capacidad de adaptarse a los requerimientos normativos futuros.

No se trata solo de una planta de clasificación, también tratará los lodos de las depuradoras y gracias al biogás obtenido, será autosuficiente energéticamente. ¿Es el comienzo de una apuesta por este tipo de energía?

En esta instalación se obtendrá energía de fuentes renovables como son el biogás producido por la materia orgánica recogida selectivamente y los lodos de depuradora y el biogás del vertedero. Se prevé además instalar paneles fotovoltaicos en los 30.000 m2 de cubierta. Con estos inputs no solo se garantiza la autosuficiencia energética de la planta si no también la exportación de excedentes a la red pública. En una isla como la nuestra que aún depende mucho de fuentes externas esto es una gran noticia. En este sentido, el proyecto representa una apuesta decidida hacia la autosuficiencia energética y el fomento de las energías renovables en la isla de Ibiza.

"El proyecto representa una apuesta decidida hacia la autosuficiencia energética y el fomento de las energías renovables en la isla de Ibiza".

Háblenos de la tecnología, ¿qué elementos destacaría?

En general se ha buscado la aplicación de las mejores técnicas disponibles y la máxima automatización en todos los procesos. Destacaria el control automático de entradas y pesaje, el modo de funcionamiento automático de los pulpos de alimentación, o los ópticos, que incorporan tecnología de inteligencia artificial. En la sala de control se ha centralizado la vigilancia y gestión de toda la planta, con la instalación de 80 cámaras. Pero lo más importante es que todo está conectado a red, de forma que los técnicos de planta, los tecnólogos de los procesos y fabricantes de equipos puedan colaborar en el mantenimiento, control y mejora continua del proceso. Esto en una isla es especialmente valorado.

"Destacaria el control automático de entradas y pesaje, el modo de funcionamiento automático de los pulpos de alimentación, o los ópticos, que incorporan tecnología de inteligencia artificial".

La normativa europea obliga a que sólo vaya a vertedero un 10% de la basura en el año 2030, con esta instalación Ibiza está un poco más cerca de conseguirlo. ¿Cuáles son los siguientes pasos?

El pasado mes de junio el Consell Insular de Eivissa aprobó el Plan Director Sectorial de Prevención y Gestión de Residuos no peligrosos de la isla de Ibiza. Este plan, que incorpora los objetivos de la normativa europea y de la Ley de Residuos de Balears, desarrolla una serie de medidas encaminadas a la reducción de los residuos generados en la isla de Ibiza así como para incrementar los residuos recogidos selectivamente, entre otras. El objetivo es trabajar para ejecutar las actuaciones previstas en el Plan para por un lado conseguir los objetivos de reducción exigidos y por otro lado conseguir incrementar las tasas de reciclaje de manera contundente y disminuir así el flujo de residuos destinados a vertedero. También hay que tener en cuenta que la Disposición adicional sexta prevé la elaboración de un estudio de alternativas (que ya se ha iniciado) que analice la capacidad y vida útil de las instalaciones de residuos de la isla y la suficiencia de estas para dar respuesta a los objetivos a medio y largo plazo. Una de las instalaciones críticas es el vertedero de Ca na Putxa y la gestión que se proponga del rechazo será decisiva para conseguir este objetivo del 10% en 2030.


Entrevista publicada en el número 227 Noviembre/Diciembre 2020 de RETEMA.

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