Cataluña expone en Bruselas su estrategia de resiliencia hídrica

Entre el 1 y 2 de octubre, una delegación del Gobierno de la Generalitat encabezada por Concha Zorrilla, directora general de Transición Hídrica, y Josep Lluís Armenter, director de la Agencia Catalana del Agua (ACA), realizó una visita oficial a Bruselas. El objetivo fue presentar la estrategia catalana del agua ante representantes del Parlamento Europeo y de la Dirección General de Medio Ambiente de la Comisión Europea, entre otras instituciones.

Durante su estancia, los responsables de la Generalitat mantuvieron reuniones con Javi López, vicepresidente del Parlamento Europeo; Luis Planas, miembro del gabinete de Jessika Roswall, comisaria de Medio Ambiente, Resiliencia Hídrica y Competitividad; Veronica Manfredi, directora de Medio Ambiente de la Comisión Europea; Miguel Castroviejo y su equipo en la REPER; Marta Mansanet, técnica del Comité de las Regiones; así como con representantes del Observatorio de Desarrollo Sostenible del Comité Económico y Social Europeo.

Una hoja de ruta para garantizar el agua

En estos encuentros, la Generalitat expuso su plan estratégico para los próximos cinco años: un despliegue de medidas orientadas a aumentar la disponibilidad de agua sin depender exclusivamente de la lluvia. La previsión es que en 2030 se cuente con 280 hectómetros cúbicos adicionales al año, gracias a fuentes como la desalinización, la regeneración, el aprovechamiento del Besòs y la optimización de las redes de distribución.

La estrategia europea de Resiliencia Hídrica, aprobada en junio de 2025, establece directrices comunes para afrontar la escasez de agua vinculada al cambio climático. Cataluña se ha convertido en un ejemplo destacado gracias a su Plan de Sequía, que desde 2021 ha permitido garantizar el suministro y evitar cortes de agua.

Entre 2022 y 2025 se generaron 309 hm³ de nuevos recursos y se ahorraron 258 hm³ mediante medidas de restricción en riego, usos urbanos y caudales ecológicos. Estas acciones impidieron que en mayo de 2023 los embalses del sistema Ter-Llobregat quedaran vacíos, lo que habría provocado 431 días sin reservas.

Asimismo, se destacó la reutilización de agua regenerada en el tramo final del río Llobregat, que entre diciembre de 2022 y enero de 2025 aportó 62 hm³ adicionales, retrasando fases de restricción más severas. Esta medida se replicará próximamente en el río Besòs, con la construcción de una nueva Estación de Regeneración de Agua.

Inversiones y apoyo europeo

El Gobierno catalán enfatizó que su estrategia hídrica se alinea con las directrices comunitarias y subrayó la necesidad de contar con el apoyo financiero de la Unión Europea. Los fondos europeos son considerados esenciales para garantizar las inversiones en infraestructuras de desalinización, regeneración y modernización de redes.

El plan contempla duplicar la capacidad de las desalinizadoras hasta alcanzar los 160 hm³ anuales en 2030 e incrementar la producción de agua regenerada hasta 245 hm³/año en 2040. Además, se destinan 130 millones de euros a más de 1.100 actuaciones para reducir fugas y mejorar la gestión de redes, junto con iniciativas de apoyo a la agricultura.

Cataluña, ejemplo europeo

Con esta estrategia integral, la Generalitat busca consolidar a Cataluña como modelo de resiliencia hídrica en Europa, no solo asegurando el suministro de agua frente a sequías cada vez más frecuentes, sino también contribuyendo a la seguridad hídrica global en el marco de la lucha contra el cambio climático.