Panticosa inaugura su nueva depuradora y Aragón se acerca al cumplimiento de las directivas europeas
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Panticosa dispone ya de una nueva estación depuradora de aguas residuales (EDAR), considerada la inversión más relevante que quedaba pendiente en materia de saneamiento en Aragón. La instalación, con capacidad para 9.900 habitantes equivalentes y un presupuesto de 9,6 millones de euros, presta servicio no solo a esta localidad, sino también a Tramacastilla de Tena, Sandiniés, Escarrilla y El Pueyo de Jaca.
El consejero de Medio Ambiente y Turismo, Manuel Blasco, inauguró oficialmente la depuradora, acompañado por el director del Instituto Aragonés del Agua, Luis Estaún, así como por los alcaldes de Panticosa, Jesús María Úriz, y de Sallent de Gállego, Jesús Gericó.
Adaptación a la estacionalidad
La nueva EDAR incorpora la tecnología SBR (reactor biológico secuencial), que permite optimizar el espacio, un aspecto fundamental en un entorno pirenaico condicionado por la orografía y la presencia de embalses. Esta tecnología se adapta con eficacia a las variaciones de caudal provocadas por la estacionalidad turística, garantizando un funcionamiento eficiente durante todo el año.
El proyecto ha incluido además una compleja red de colectores, que concentró la mitad del presupuesto y supuso un reto de ingeniería por la dificultad de los trazados para conectar los diferentes puntos de vertido.
Con la entrada en funcionamiento de la nueva planta, Aragón logra depurar el 91,7% de su carga contaminante total, acercándose al pleno cumplimiento de las directivas europeas en materia de tratamiento de aguas residuales urbanas.
Inversiones en marcha y próximas licitaciones
Actualmente, el Instituto Aragonés del Agua ejecuta directamente varias depuradoras en el Pirineo, con una inversión conjunta de 31 millones de euros. Entre ellas destacan:
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Aínsa (8,8 millones de euros)
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Boltaña (6,4 millones)
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Villanúa (4,7 millones)
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Candanchú (3,5 millones)
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Canfranc-Estación (3 millones)
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Hecho-Siresa (4,1 millones)
Todas estas instalaciones han sido diseñadas con soluciones técnicas adaptadas a la complejidad del terreno y darán servicio a poblaciones de entre 3.000 y 6.500 habitantes equivalentes. Los sistemas aplicados combinan fangos activos, biodiscos, humedales y reactores SBR.
Planes de futuro: hacia el 100% de depuración
El Gobierno de Aragón tiene previsto iniciar en 2026 las obras de nuevas depuradoras en Astún, Cerler y Broto-Oto, además de la de Nonaspe (Zaragoza). También cuentan con proyecto aprobado las EDAR de Canfranc pueblo, Bielsa y Castiello de Jaca, pendientes de licitación, mientras que en Fiscal y Piedrafita de Jaca las actuaciones esperan validación final.
En conjunto, estas obras representan una inversión global de 75 millones de euros y permitirán completar la depuración en los principales núcleos de más de 1.000 habitantes equivalentes en la cabecera de los ríos aragoneses.
Cumplimiento adelantado de la directiva europea
La Directiva 2024/3019 establece que todas las aglomeraciones urbanas de más de 1.000 habitantes equivalentes deben contar con sistemas de depuración antes de 2035. Con el actual Plan de Saneamiento y Depuración, Aragón prevé alcanzar este objetivo en 2027, adelantándose con holgura a los plazos marcados por la normativa europea.

