Lanzarote avanza hacia un regadío más sostenible con una inversión de 24,4 millones en aguas no convencionales

Con el objetivo de transformar el modelo de riego agrícola hacia uno más eficiente y respetuoso con el medio ambiente, el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, a través de la Sociedad Mercantil Estatal de Infraestructuras Agrarias (Seiasa), está desarrollando una actuación de modernización valorada en 24,4 millones de euros (sin incluir el Impuesto General Indirecto Canario). Esta inversión está destinada a que el sector agrario de Lanzarote pueda utilizar aguas procedentes de fuentes no convencionales para el riego.

Visita institucional 

Durante una visita a las obras en la zona nordeste de Lanzarote, específicamente en los municipios de Tinajo y Teguise, la secretaria de Estado de Agricultura y Alimentación, Begoña García Bernal, ha explicado los beneficios de este ambicioso proyecto. Según sus declaraciones, la actuación permitirá la modernización del regadío en 300 hectáreas, centradas en su mayoría en cultivos hortícolas, y beneficiará a un total de 667 regantes.

“Una de las metas que nos marcamos hace mucho tiempo fue transformar el sector del regadío”, señaló García Bernal, “y hacerlo mucho más moderno, sostenible y eficiente”.

Infraestructura avanzada y energías limpias

Dentro del proyecto se contempla la construcción de infraestructuras clave que garantizan la eficiencia del sistema:

• Una planta desaladora de agua marina mediante ósmosis inversa, ubicada junto a la depuradora nordeste.

• Estación de bombeo, balsa y depósito de agua, esenciales para el almacenamiento y distribución.

• Un aerogenerador, que aportará energía renovable al sistema.

• Red de riego completamente renovada.

Estas instalaciones estarán equipadas con sistemas de telemedida y tecnología de telecontrol, herramientas que permitirán gestionar el riego de forma más precisa, reducir pérdidas y optimizar recursos hídricos y energéticos.

Un proyecto alineado con el plan de recuperación europeo

Más allá de la innovación tecnológica, esta iniciativa destaca por fomentar el uso de energías renovables, lo que se traduce en una disminución de emisiones de gases de efecto invernadero y en una notable reducción de la factura energética para los agricultores. Esta mejora no solo impulsa la sostenibilidad ambiental, sino que también favorece el relevo generacional, al contribuir a una mejor calidad de vida en el medio rural.

La actuación se integra en el programa de eficiencia y sostenibilidad en regadíos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, contando con financiación del fondo europeo NextGenerationEU, que respalda proyectos estratégicos para la transición ecológica y digital del sector agrario.