Rebi pone en marcha en Ólvega la primera Red de Calor de España hibridada con energía solar y bomba de calor
La empresa soriana lidera un proyecto pionero que combina energía solar térmica, fotovoltaica y biomasa para reducir un 28 % el consumo y las emisiones en su red de calor
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La compañía Rebi, a través de su departamento de I+D+i, ha desarrollado y puesto en marcha en su Red de Calor de Ólvega un sistema de generación de energía único en España, basado en la hibridación de un campo solar mixto con una bomba de calor de alta temperatura de condensación. Esta tecnología pionera convierte a Ólvega en el primer municipio del país en integrar este modelo de aprovechamiento energético.
“El compromiso de Rebi sigue siendo con Soria. Por eso, todas nuestras innovaciones se prueban primero aquí, donde nació la empresa, antes de implantarlas en otras redes”, destaca Alberto Gómez, director ejecutivo de la compañía.
“Con esta iniciativa, hemos querido reducir el consumo de biomasa en la central de calor de Ólvega y generar energía térmica y eléctrica limpia gracias a paneles híbridos de última generación”, añade.
Energía híbrida para una calefacción más sostenible
La central de calor de Ólvega, en funcionamiento desde 2012, abastece actualmente a 162 viviendas, nueve edificios públicos y uno privado. Con la incorporación del nuevo campo solar, Rebi amplía la potencia térmica de la planta, que ya contaba con dos calderas de biomasa de 4,6 MW.
El campo solar híbrido, formado por 543 paneles de última generación, es capaz de aprovechar el 89 % de la radiación solar y producir 800 kW térmicos y 200 kW eléctricos. Esta electricidad se utiliza íntegramente para autoconsumo, mientras que el calor se inyecta en la red mediante un sistema de bombas de calor agua-agua que no generan emisiones contaminantes.
El campo solar híbrido, formado por 543 paneles de última generación, es capaz de aprovechar el 89 % de la radiación solar y producir 800 kW térmicos y 200 kW eléctricos.
La instalación permite generar 1,3 GWh anuales de energía térmica, equivalente al 28 % del total producido por las calderas de biomasa, lo que se traduce en un importante ahorro de combustible y reducción de emisiones.
El proyecto ha supuesto una inversión superior al millón de euros y marca un nuevo hito en la transición energética de Rebi.
“Hemos replicado ya el sistema en la Red de Calor de Cuenca, incorporando además un recuperador de humos que mejora aún más la eficiencia del circuito”, apunta Gómez.
