Sogama licita por más de 4,2 millones la gestión integral de tres plantas de biorresiduos
El contrato incluye la operación, mantenimiento y limpieza de las instalaciones de Cervo, Verín y Vilanova de Arousa, así como la distribución y comercialización del abono resultante.
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Sogama ha licitado, por un importe de 4.247.900 euros (IVA incluido), la gestión integral de las plantas de biorresiduos de Cervo (Lugo), Verín (Ourense) y Vilanova de Arousa (Pontevedra) ), de la que es titular.
El contrato, con una duración de 2 años y una prórroga excepcional de 9 meses, incluye la operación, mantenimiento y limpieza de estas tres instalaciones, cuya función es producir compost de calidad a partir de la materia orgánica depositada por los ciudadanos en los contenedores marrones municipales.
El proceso industrial comprenderá las fases de pretratamiento, fermentación, maduración y refinamiento, de acuerdo con los manuales de funcionamiento de los diferentes equipos y siguiendo las instrucciones de los fabricantes, debiendo además la empresa adjudicataria asumir la distribución y comercialización del fertilizante resultante.
Sogama prevé que la gestión integral de estas plantas, con una capacidad conjunta de 21.000 toneladas de materia orgánica y 7.000 toneladas de estructurante, se inicie una vez finalizada su puesta en marcha, actualmente en manos de las empresas adjudicatarias de su construcción.
Así, el calendario que se maneja es el próximo 1 de junio para Cervo; 1 de julio, para Verín; y el 2 de noviembre, para Vilanova de Arousa. El plazo de presentación de ofertas expira el próximo 1 de abril, a las 14.00 horas.
Red formada por 17 instalaciones
Cabe recordar que Sogama, por encargo de la Xunta, completó en 2023 la red pública de infraestructuras para la valorización de la materia orgánica, estando formada por estas tres plantas de biorresiduos (Cervo, Verín y Vilanova ), además de la de Cerceda, y 13 plantas de transferencia de apoyo que fueron equipadas con una tolva específica para el traslado de la materia orgánica desde los camiones recolectores municipales, siendo ésta transportada a la planta de biorresiduos más cercana.
El objetivo era ayudar a los ayuntamientos a cumplir la legislación vigente y conseguir que la práctica totalidad de los socios de Sogama (295) dispusieran de una planta de biorresiduos o de transferencia a menos de 50 kilómetros de distancia.
Para llevar a cabo esta obra, la empresa pública realizó una inversión de 45 millones de euros, de los cuales 30 millones procedieron de los Fondos FEDER REACT-EU como respuesta de la Unión Europea a la crisis del Covid-19.
