Las ciudades enfrentan desafíos críticos en la gestión del agua debido a la coexistencia de fenómenos extremos agravados por el cambio climático: la escasez hídrica que provoca sequías intensas, o las lluvias torrenciales que generan inundaciones devastadoras. Esta paradoja es especialmente compleja en territorios mediterráneos, como refleja el último episodio de DANA que azotó a Valencia. Estos fenómenos meteorológicos evidencian la necesidad de que las regiones adquieran una visión estratégica y anticipadora para poder hacer frente a estos desafíos.
En este sentido, algunas ciudades ya han empezado a remar en esta dirección, emprendiendo acciones para reforzar la seguridad y la sostenibilidad hídrica, y para mitigar los efectos del cambio climático.
Castellón se ha posicionado como una ciudad a la vanguardia en la gestión sostenible del agua, liderando la implantación de planes estratégicos para garantizar la seguridad hídrica, como el plan de emergencia ante situaciones de sequía o el plan director de aguas regeneradas.
Un ejemplo destacado es el de Castellón de la Plana, que de la mano de su concesionaria Facsa, ha hecho frente a estos retos apoyándose en el uso de tecnologías de vanguardia y el desarrollo de soluciones innovadoras con el objetivo de emprender acciones que refuercen la seguridad y el uso sostenible del recurso.
En este sentido, Castellón se ha consolidado como una ciudad pionera en la gestión sostenible del agua, liderando la implantación de planes estratégicos para el cumplimiento de tales objetivos. La aprobación de su Plan de Emergencia ante situaciones de Sequía o el Plan Director de Aguas Regeneradas son muestra de ello. Estas iniciativas no sólo aseguran un abastecimiento de calidad y una clara apuesta por la sostenibilidad, sino que también refuerzan el modelo de ciudad responsable, eficiente e inteligente.
La implantación del Plan de Emergencia ante situaciones de Sequía (PEM) establece el protocolo de actuación ante escenarios de desabastecimiento y previos, definiendo las medidas a adoptar para garantizar el suministro de agua en momentos críticos y mitigar el impacto de una potencial escasez en la población y en algunos sectores estratégicos como la agricultura.
“Desde el consistorio tenemos la responsabilidad de garantizar la sostenibilidad hídrica y un suministro de agua de la máxima calidad con todas las garantías para los castellonenses. Para ello, debemos mejorar nuestra eficiencia y aprovechar las herramientas que nos ofrece la digitalización para recabar toda la información sobre el destino de cada gota de agua que se consume en la ciudad”, afirma Cristóbal Badenes, director de Servicios Urbanos, Infraestructuras y Sostenibilidad del Ayuntamiento de Castellón.
"Desde el consistorio tenemos la responsabilidad de garantizar la sostenibilidad hídrica y asegurar un suministro de agua de la máxima calidad. Para ello, debemos mejorar nuestra eficiencia y aprovechar las herramientas que nos ofrece la digitalización", afirma Cristóbal Badenes, Director de Servicios Urbanos, Infraestructuras y Sostenibilidad del Ayuntamiento de Castellón.
Castellón cuenta con la particularidad de ser la única capital de provincia en España que se abastece al cien por cien de aguas subterráneas. Sin embargo, consciente de la importancia de una gestión responsable del recurso, la ciudad ha intensificado las actuaciones para garantizar un uso más eficiente. Este compromiso queda reflejado en la tendencia ascendente que está experimentando su red de distribución en materia de rendimiento hidráulico, que ha llegado a alcanzar hasta el 90% de rendimiento.
El Ayuntamiento de Castellón ha implementado diversas medidas para mejorar la resiliencia de la ciudad ante situaciones de sequía, como la apuesta por el uso de tecnologías avanzadas de monitorización y control o la implantación de una red separativa para la reutilización de aguas regeneradas procedentes de la EDAR.
“Gracias a la aplicación de nuevas tecnologías y con un equipo humano cualificado y comprometido hemos consolidado una tendencia ascendente en eficiencia de la red de la ciudad de Castelló”, afirma Patricia Agrasar, coordinadora de zona en Facsa. En este sentido, se han implementado una serie de medidas concretas alineadas con las directrices de este plan.
Estas acciones incluyen la monitorización continua y el uso de tecnologías avanzadas, la mejora y modernización de las infraestructuras hídricas, la implantación masiva de contadores inteligentes, el uso de sistemas de localización mediante data loggers, el fomento del uso productivo del agua, así como un aspecto en el que la ciudad ha sido también pionera: la implantación de una red separativa para la reutilización de aguas regeneradas procedentes de la EDAR.
Esta actitud proactiva hacia la sostenibilidad ambiental y, en su afán por dar un servicio de calidad, Castellón ha implementado modernas tecnologías para mejorar la eficiencia de la red del agua. Un ejemplo de ello es el uso de dashboards, o cuadros de mando integrales, basados en tecnología ArcGis. Estas herramientas visuales interactivas permiten monitorizar, analizar y gestionar la información geoespacial en tiempo real.
Asimismo, recopilan datos de diversas fuentes, como sensores de calidad del agua, caudalímetros o transductores de presión, y los presentan de manera visualmente accesible. Esta información, reflejada en mapas, gráficos y tablas, ayuda a los gestores de la red a conocer el estado actual de las infraestructuras. En el caso de Castellón, se pueden conocer las fugas y las inspecciones que ha tenido cada tramo de red, lo que favorece la toma de decisiones a la hora de planificar la renovación de los tramos de la red o de conocer los cortes de suministro, las afecciones en tiempo real y, de esta manera, remitir avisos a la población que pueda verse más afectada.
Esta visión anticipadora y estratégica de la ciudad se ve reflejada también en las acciones emprendidas en materia de reutilización, y es que Castellón es una de las primeras ciudades en maximizar el uso eficiente del agua mediante una red separativa de agua regenerada, un claro ejemplo de economía circular aplicada a la gestión del agua. Ateniendo al Plan Nacional de Depuración, Saneamiento, Eficiencia, Ahorro y Reutilización (DSEAR), la reutilización directa de las aguas residuales puede ser muy positiva, fundamentalmente en zonas costeras cuyos vertidos van directamente al mar a través de emisarios submarinos, como es el caso de Castellón.
Para ello, la capital de la Plana cuenta con un Plan Director de Aguas Regeneradas a través del cual se ha realizado un diagnóstico de la situación de la ciudad para reutilizar el recurso y analizar sus potenciales usos. De esta manera, esta agua se destina al baldeo de calles y al riego de áreas ajardinadas en zonas como el Parque Litoral, en el Grao de Castellón, o en el bulevar Blasco Ibáñez, en la zona del Auditorio y en el Parque Rafalafena en la ciudad.
En la actualidad, la ciudad cuenta con 6 kilómetros de red de transporte y 9 kilómetros de red de distribución y riego con las que riega el 20 % de la superficie ajardinada de la ciudad. Además, la corporación municipal contempla futuras ampliaciones para este sistema con el objetivo de seguir preservando las reservas de agua potable y avanzando hacia una gestión más sostenible del entorno urbano.
“Las infraestructuras hídricas son la columna vertebral en la gestión del agua y Castellón, consciente de esta realidad y de la necesidad de modernizar estas instalaciones y adaptarlas a los nuevos tiempos, ha acometido diferentes actuaciones para garantizar el suministro, prevenir inundaciones y avanzar hacia una gestión cada vez más eficiente y sostenible” explica Ines Beltrán Ingeniera Industrial y Jefa de sección de Infraestructuras Urbanas y Sostenibilidad del Ayuntamiento de Castellón.
El consistorio se encuentra inmerso en la construcción de un nuevo pozo en la parte noroeste de la ciudad, del que se espera que proporcione un caudal mínimo de 350 m3/h, lo equivalente a llenar una piscina olímpica en unas siete horas. Además, la capital castellonense ha puesto el foco en la economía circular urbana y un claro ejemplo de ello es la implantación de sistemas de drenaje sostenible (SUDS) para fomentar el aprovechamiento de escorrentia pluvial en la ciudad.
En el año 2023, reeditó una Guía Básica de Diseño para fomentar y facilitar la gestión sostenible del agua de lluvia en las actuaciones de urbanización y edificación de la ciudad. Asimismo, para guiar a los proyectistas y fomentar la concienciación ciudadana, el Ayuntamiento ha publicado un documento para facilitar la redacción del Anejo de cálculo hidrológico-hidráulico de proyectos que contemplen SUDS en el término municipal de Castellón, para guiar a los proyectistas y fomentar la concienciación ciudadana.
"Las infraestructuras hídricas son la columna vertebral en la gestión del agua y Castellón, consciente de esta realidad, ha acometido diferentes actuaciones para garantizar el suministro, prevenir inundaciones y avanzar hacia una gestión cada vez más eficaz", comenta Inés Beltrán, Jefa de sección de Infraestructuras Urbanas y Sostenibilidad del Ayuntamiento de Castellón.
El servicio de agua de Castellón es un referente en innovación tecnológica, destacando especialmente su avanzado centro de telecontrol y telemando, pionero en su ámbito. Este centro monitoriza y controla las instalaciones de abastecimiento las 24 horas del día, los 365 días del año, garantizando un servicio eficiente y de calidad. Castellón ha sido pionera en la implementación de sistemas de telemando en instalaciones hídricas que han permitido desarrollar poderosas herramientas tecnológicas que permiten gestionar las redes de abastecimiento eficientemente y caminar hacia el objetivo de terminar de perfeccionar gemelos digitales de la red.
Castellón es un referente en innovación tecnológica, destacando especialmente su avanzado centro de telecontrol y telemando, pionero en su ámbito.
Estas herramientas facilitan la toma de decisiones y el análisis geoespacial con una visión integral. Asimismo, en la actualidad, más de 60.500 contadores de la ciudad ya cuentan con sistema de telelectura, es decir casi el 60 % de los hogares.
Un ejemplo de esta innovación es también el estudio hidrodinámico de los aliviaderos de la red de saneamiento de la ciudad que, mediante herramientas de simulación y medidas experimentales, tiene como objetivo entender y reproducir el comportamiento hidráulico de los aliviaderos de Castellón simulando su comportamiento mediante técnicas de simulación computacional de fluidos. De esta manera es posible determinar a qué caudal circulante se produce el alivio en estas estructuras hidráulicas y calcular el caudal aliviado.
Otro ejemplo es el de la planta de tratamiento de aguas residuales, donde se han implementado metodologías de modelización computacional para mitigar los olores generados en las Estaciones Depuradoras de Aguas Residuales (EDAR) y se han integrado algoritmos de control basados en Inteligencia Artificial para optimizar el funcionamiento de los equipos de aireación y, de esta manera, mejorar la eficiencia energética y el rendimiento de estas instalaciones.
Este compromiso de la ciudad con la digitalización y la innovación tecnológica ha seguido evolucionando hasta la actualidad como demuestra el apoyo del Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico a través del PERTE de digitalización del ciclo integral del agua, que ha otorgado al Ayuntamiento de Castellón y a Facsa una subvención de casi 6 millones de euros de fondos europeos. Este proyecto, pionero a nivel nacional y que es fruto de la colaboración público-privada, permitirá dar un salto tecnológico en los sistemas de gestión hídrica a través de casi una veintena de actuaciones en todas las fases del ciclo integral del agua.
En concreto, en los sistemas de abastecimiento y distribución de agua potable, se ejecutará un estudio hidrogeológico para establecer perímetros de protección, modelización CFD de procesos cinéticos en tanques de desinfección, control de fugas, sensorización del acuífero (25 sensores de nivel, 25 de conductividad, 5 de nitratos, 5 de turbidez y 4 pluviómetros), modelización del sector central del acuífero de la Plana, sensorización de captaciones (cloro, pH, conductividad, nitratos, sulfatos) y sensorización de la red de distribución (8 sensores multiparamétricos) sí como 15.866 contadores inteligentes.
La voluntad del consistorio de acercar la cultura del agua a la ciudadanía abarca numerosas iniciativas, todas ellas orientadas a fomentar un consumo consciente y sostenible del recurso
En el marco del proyecto y por lo que respecta a las instalaciones de saneamiento, se está trabajando en la elaboración de planes integrales de gestión del sistema de saneamiento (PGIS), y controles de 37 puntos de vertido, 3 estaciones meteorológicas y una de turbidez. Además, en las estaciones depuradoras se acometerán actuaciones de modelizaciones hidráulicas, control de alivios o analizadores de cloro en agua regenerada, en el marco del Plan de Gestión de riesgos del agua regenerada en usos urbanos, entre otras acciones.
Asimismo, este proyecto facilitará contar con mayores medidas de ciberseguridad y transparencia para que los castellonenses puedan conocer y controlar en todo momento su consumo de agua. Todas estas actuaciones, que ya han comenzado a implantarse, permitirán anticipar posibles incidencias, reducir el desperdicio de agua y optimizar los procesos de mantenimiento, posicionando a la ciudad como pionera en la gestión hídrica sostenible gracias a la innovación tecnológica.
A estas acciones técnicas se suman las nuevas iniciativas dirigidas a concienciar a la ciudadanía, como ‘El valor del agua’, la campaña impulsada por el Ayuntamiento de Castellón y Facsa durante los meses más críticos de la sequía, que ha marcado un antes y un después en la forma de comunicar y sensibilizar a la población.
Con el lema ‘Para seguir siendo lo que somos, cuidemos el agua’ esta iniciativa –dirigida tanto a castellonenses como a turistas-, trasciende a las habituales imágenes de terrenos secos y ofrece una visión positiva frente a los escenarios catastróficos a los que se suele recurrir en este tipo de campañas. Esta iniciativa subraya la profunda conexión del agua con la identidad y la cultura de la sociedad castellonense, destacando la importancia del recurso hídrico como parte esencial de la vida y fomentando una relación consciente y responsable con el entorno.
Este renovado enfoque complementa a otras campañas que Facsa mantiene activas para promover el uso responsable del agua, entre las que destacan ‘Resta segundos, suma litros’, iniciativa dirigida a sensibilizar sobre la importancia de usar el agua de forma racional y de no hacer un gasto innecesario, o ‘El caos de las toallitas’, para concienciar sobre los efectos negativos que implica el simple hecho de tirar una toallita por el inodoro. Cabe destacar, el evento lúdico-divulgativo del día mundial del agua, donde el Consistorio y Facsa en cooperación con Confederación y la Universidad de Castellón, llevaron a la calle talleres formativos, para sensibilizar a los más pequeños con la importancia de cuidar el agua.
La voluntad de Facsa de acercar la cultura del agua a la ciudadanía abarca numerosas iniciativas, todas ellas orientadas a fomentar un consumo consciente y sostenible del recurso. Entre ellas destaca el impulso al consumo de agua del grifo, promovido a través de acciones como la Watertruck, un vehículo itinerante que garantiza el acceso a agua de grifo en eventos festivos, culturales y deportivos. Esta propuesta, que pone de manifiesto las ventajas de elegir agua del grifo frente a opciones embotelladas, contribuye a reducir el uso de plásticos y, con ello, la huella ambiental, reforzando el compromiso de la compañía con la sostenibilidad.
Estas se suman a otras iniciativas enfocadas a divulgar el valor del agua entre las generaciones más jóvenes, como ‘El Curso del Agua’ desde 2015 o #conéctatealagua desde 2021, que ya han llegado a más de 13.400 escolares de La Plana y cerca de 1.500 estudiantes de la ESO, bachiller y otros colectivos de Castellón desde su puesta en marcha.
Con todo esto, la estrecha colaboración entre la administración local y la concesionaria refleja cómo una visión estratégica y anticipadora puede ofrecer respuestas sostenibles a los retos que plantea el cambio climático. A través de un servicio guiado por la innovación y la tecnología, la apuesta por la mejora de las instalaciones hídricas y una férrea voluntad por acercar la importancia del agua a la sociedad, Castellón se ha posicionado como referente para otras ciudades a la hora de gestionar de forma eficaz el agua y garantizar su disponibilidad para las generaciones presentes y futuras.
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