Leblan, líder en soluciones llave en mano para el tratamiento de residuos

Leblan, compañía líder en soluciones para el tratamiento de residuos, ha participado en el Complejo Medioambiental de Valsequillo a través de un servicio integral llave en mano. Leblan está formado por un amplio equipo de profesionales que cuentan con una dilatada experiencia en ingeniería, fabricación, montaje y mantenimiento de instalaciones para el tratamiento de todo tipo de residuos, como residuos sólidos urbanos, residuos de construcción y demolición o, residuos industriales no peligrosos.

Leblan es una de las compañías españolas con más experiencia en el sector, contando actualmente con más de 60 instalaciones que afianzan su posición como líder en el sector de la fabricación y distribución de maquinaria para el tratamiento de residuos.

El Complejo Medioambiental de Valsequillo está gestionado por el Consorcio Provincial de Residuos Sólidos Urbanos de Málaga, y permite gestionar los residuos producidos por los 91 municipios del ámbito de gestión del Consorcio. El Complejo se compone de una zona de pretratamiento, un área de fermentación, una nave de maduración y afino, y una balsa para gestión de los lixiviados y pluviales.

El área de pretramiento está dividida en tres zonas: la plataforma de descarga de residuos, a la que acceden los vehículos de recogida municipal y de transferencias; la playa de descarga, sobre la que vierten el residuo entrante; y el área de equipos de pretratamiento, donde se realiza la clasificación de los distintos residuos.

La etapa de fermentación aerobia se realiza en 20 digestores cerrados donde se controla la temperatura y la aireación, a través de un sistema de ventilación forzada con sistemas de apoyo y depuración necesarios para la gestión integral de los fluidos. El tratamiento de depuración del aire extraído de los túneles se realiza con biofiltros para evitar los malos olores producidos por los gases de fermentación.

El material procedente de cada túnel, se carga con pala en un alimentador de tornillo sin fin que lo introduce en la cinta que transporta hacia la nave de maduración y afino. Para el afino del residuo, existen dos líneas constituidas por una criba de malla elástica y una mesa densimétrica que separan los rechazos por tamaño y densidad respectivamente.