Luz verde al marco general de la participación social y administrativa en materia de agua de Andalucía
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El Consejo de Gobierno ha aprobado el decreto que regula el marco general de los órganos colegiados de participación social y administrativa en materia de agua. Como principal novedad, la norma recoge la creación de las Comisiones para la Gestión de la Sequía y del Gabinete Permanente para situaciones de emergencia. Estos dos nuevos entes completan la relación de los nueve previstos por la Ley 9/2010, de Aguas de Andalucía, para garantizar la coordinación de las administraciones y la participación de usuarios, gestores, técnicos, expertos y organizaciones sociales, sindicales y empresariales en la planificación y gestión de los recursos hídricos.
Las Comisiones para la Gestión de la Sequía podrán constituirse en el seno de los Consejos del Agua de las distintas demarcaciones hidrográficas intracomunitarias (Guadalete y Barbate; Tinto, Odiel y Piedras, y Cuencas Mediterráneas Andaluzas). Entre otras funciones, controlarán el cumplimiento de los planes especiales de actuación ante episodios de escasez de recursos hídricos, coordinarán a las distintas administraciones públicas e informarán, con carácter previo, de las medidas que se adopten una vez declarada la situación de emergencia.
La presidencia de estas comisiones corresponderá a la persona titular de la secretaría general con competencia en materia de agua. Sus vocalías estarán integradas por representantes de las administraciones autonómica, central y local, y de las organizaciones sindicales, empresariales, ecologistas y de consumidores y usuarios. En el caso de las demarcaciones hidrográficas del Guadalete-Barbate y de las Cuencas Mediterráneas Andaluzas, también habrá representación vinculada a los usos hidroeléctricos.
Por su parte, el Gabinete Permanente se creará automáticamente en casos de avenidas, inundaciones y circunstancias de riesgo similares. Será el órgano encargado de adoptar las pertinentes medidas de respuesta, incluidos los desembalses extraordinarios. Asimismo, informará y asesorará a las autoridades competentes en protección civil cuando se produzcan emergencias por inundaciones.
La persona titular de la secretaría general en materia de agua desempeñará también la presidencia del Gabinete Permanente, que estará integrado por los responsables de las direcciones generales competentes en infraestructuras, explotación, planificación y gestión del dominio público hidráulico, así como de las delegaciones territoriales de la Junta en las provincias afectadas. También formarán parte de este órgano la persona encargada de la coordinación y explotación de presas de la Junta, que ejercerá la secretaría, y los responsables de las direcciones de explotación de los sistemas implicados.
Junto con la creación de los dos nuevos órganos colegiados, el decreto aprobado actualiza las competencias y estructuras de los siete restantes que actualmente funcionan en materia de aguas en Andalucía, además de unificar el marco de regulación general de todos ellos manteniendo su adscripción a la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio. Entre otras novedades, se introduce el principio de representación equilibrada entre hombres y mujeres en las designaciones de sus integrantes.
Además de las Comisiones para la Gestión de la Sequía y del Gabinete Permanente para inundaciones y avenidas, la relación de los órganos de participación previstos en la Ley de Aguas de Andalucía se completa con la Comisión de Seguimiento para la Prevención de Inundaciones Urbanas, los Comités de Gestión (para la explotación de las obras hidráulicas y gestión de los recursos), el Consejo Andaluz del Agua, el Observatorio del Agua de Andalucía, la Comisión de Autoridades Competentes de las Demarcaciones Hidrográficas, los Consejos de Agua de las Demarcaciones Hidrográficas y la Comisión de Explotación del Trasvase Guadiaro-Guadalete.
Demarcaciones hidrográficas
Estos nueve órganos colegiados apoyan a la Administración andaluza del agua en el ejercicio de sus plenas competencias sobre las cuencas situadas íntegramente dentro de la comunidad autónoma. Su ámbito territorial se organiza en tres demarcaciones hidrográficas: Cuencas Mediterráneas Andaluzas, Guadalete-Barbate y Tinto, Odiel y Piedras.
Las cuencas mediterráneas andaluzas abarcan 17.952 kilómetros cuadrados entre el Campo de Gibraltar (Cádiz) y la desembocadura del río Almanzora (Almería), en las provincias de Cádiz, Málaga, Granada y Almería. Esta demarcación, la más extensa entre las situadas íntegramente en territorio andaluz, cuenta con 10.395 kilómetros cuadrados de acuíferos y once grandes embalses en explotación, cuya capacidad total alcanza los 1.092 hectómetros cúbicos. Los regadíos, que suman una extensión total de 160.000 hectáreas, constituyen el principal uso del agua, con el 73,6% de los recursos. El resto se reparte entre abastecimiento urbano (21,4%), industria (2,7%) y otros usos (2,3%). La población residente supera los 2,7 millones de habitantes, repartidos en 250 municipios, a los que se suman los numerosos visitantes que eligen el territorio como destino turístico.
La demarcación Guadalete-Barbate abarca las cuencas de estos dos ríos de la mayor parte de la provincia de Cádiz, así como los acuíferos y la zona costera entre los límites de Tarifa y Algeciras y la Punta del Camarón en Chipiona, con una extensión total de 5.969 kilómetros cuadrados. Este territorio tiene una población superior al millón de habitantes y sus principales demandas son la agraria (306,8 hectómetros cúbicos/año) y la urbana (107,9). Presenta unas aportaciones naturales de 842 hectómetros cúbicos anuales y una capacidad de embalse de 1.651,7. Sus acuíferos ocupan 1.910 kilómetros cuadrados.
Finalmente, la Demarcación Hidrográfica del Tinto, Odiel y Piedras (4.761,82 kilómetros cuadrados y más de 485.000 habitantes) se corresponde con las cuencas de estos ríos onubenses y sus aguas subterráneas y zonas costeras y de influencia mareal. Este territorio recibe unas aportaciones naturales medias de 943 hectómetros cúbicos anuales. Su capacidad de embalse alcanza los 679,1 hectómetros cúbicos y las aguas subterráneas ocupan 1.018,5 kilómetros cuadrados.