La valorización energética es fundamental en el tratamiento de residuos no reciclables
- 1700 lecturas
Con motivo de la publicación del paquete climático “Fit for 55”, ESWET ha reafirmado la contribución esencial de la valorización energética (Waste-to-Energy) a la gestión de residuos en Europa. Waste-to-Energy ya contribuye a la descarbonización del sector, ya que desvía los residuos no reciclables de los vertederos y recupera energía y materias primas secundarias.
Reducir los vertederos significa, en primer lugar, reducir las emisiones de metano, un gas que es hasta 84 veces más potente que el CO2 en 20 años. Además, la recuperación de energía (electricidad, calor y vapor) y materias primas secundarias ahorra recursos vírgenes y mejora el consumo de energía y materiales en Europa.
Dos archivos incluidos en el paquete climático “Fit for 55” están directamente relacionados con las operaciones de conversión de residuos en energía: la Directiva sobre energías renovables (RED) y el Sistema de comercio de emisiones (ETS). En ambos casos, las revisiones propuestas por la Comisión Europea preservan la contribución positiva de Waste-to-Energy al tratamiento seguro de residuos no reciclables.
En primer lugar, la propuesta de revisión de la Directiva sobre energías renovables (RED) aborda con precisión la urgencia de aprovechar todas las fuentes de energía renovables disponibles, incluida la electricidad, el vapor, la calefacción y la refrigeración generados a partir de residuos no reciclables. De hecho, alrededor del 50% de la producción de energía de las plantas de conversión de residuos en energía es renovable, ya que proviene de la fracción biodegradable de los residuos.
Con respecto a la revisión del ETS, la decisión de mantener todo el sector de la gestión de residuos bajo el Reglamento de reparto del esfuerzo es una evaluación reflexiva. Incluir la incineración de residuos municipales solo en el EU ETS sin ninguna evaluación de impacto inicial previa causaría efectos secundarios como un mayor costo de reciclaje, tarifas adicionales para los municipios y un aumento en los residuos no reciclables enviados a vertederos legales e ilegales.
El siguiente paso para reducir aún más las emisiones de GEI de los desechos no reciclables es respaldar la implementación de la captura y almacenamiento de carbono (CAC) en las plantas de conversión de residuos en energía. El sector puede volverse carbono neutral o incluso carbono negativo, como lo demuestran varios proyectos piloto en Europa.
"La Comisión Europea estableció un ambicioso conjunto de medidas para reducir drásticamente las emisiones de las industrias europeas", destaca Patrick Clerens, Secretario General de ESWET. "Los proveedores de conversión de residuos en energía están comprometidos a tomar las medidas necesarias para alcanzar la neutralidad de carbono con el apoyo de la Unión Europea".
Debido a la complejidad del tema, ESWET cree que las reformas que cubren el sector de la gestión de residuos siempre deben evaluar cuidadosamente las consecuencias ambientales y económicas, teniendo en cuenta el amplio impacto en toda la cadena de gestión de residuos y el suministro de energía local.