La Agencia Catalana del Agua incrementa los puntos para controlar los volúmenes de las aguas subterráneas

La Agencia Catalana del Agua (ACA) ha adjudicado un contrato para llevar a cabo la redacción del proyecto constructivo para incrementar los puntos de control de las aguas subterráneas y poder así analizar la variación de sus volúmenes. El contrato se ha adjudicado por un importe superior a los 40.000 euros y se dispondrá de un plazo de tres meses para llevar a cabo los trabajos de redacción, una vez esté firmado el contrato. Asimismo, se contempla que las obras de construcción de estos puntos de control se podría materializar a finales de este año.

El proyecto prevé construir nuevo piezómetros en la demarcación de Tarragona (concretamente en los municipios del Pla de Santa Maria/Valls, Cambrils, Montblanc/Espluga de Francolí, Montblanc/la Riba, Pira/Sarral/Solivella, Alforja/Maspujol/Aleixar/Les Borges del Campo, Vandellós-Pratdip y la Ametlla de Mar -2-) y seis en la de Girona (Llers, Riudellots de la Selva, Viloví d'Onyar, Llagostera y Calonge (2)).

Estos nuevos piezómetros completarán la red de cerca de 270 piezómetros ya existentes en las cuencas internas de Cataluña. Asimismo, estos nuevos puntos de control permitirán ampliar el alcance y detalle del nuevo Programa de seguimiento y control en cuanto a las aguas subterráneas, que la Agencia debe aprobar en 2018 y será vigente hasta el 2024.

Una vez redactado y aprobado el proyecto, se llevarán a cabo los trabajos constructivos, que consistirán en la perforación, la testificación -tanto geofísica como geològica-, la entobació, el empaquetamiento de gravas, cimentaciones, el acabado superficial, la limpieza del piezómetro y la nivelación. Una vez llevadas a cabo estas actuaciones, se hará un ensayo del bombeo, el muestreo y la sensorización de medidas.

Cerca de 600 hm3 provenientes de las aguas subterráneas

Las extracciones totales de agua subterránea en Cataluña se cuantifican en un promedio de cerca de 600 hm3/año. Además de satisfacer las demandas de abastecimiento doméstico, usos industriales y agrícolas, en periodos de estiaje las aguas subterráneas representan en muchas ocasiones la única fuente de alimentación hídrica de los ecosistemas fluviales, contribuyendo al mantenimiento de zonas húmedas y masas de agua superficiales.