El proyecto del acueducto El Realito en México, ejemplar modelo de colaboración público-privada

El centro “PPP for Cities”, que forma parte del programa sobre Asociaciones Público-Privadas del International PPP Centre of Excellence de las Naciones Unidas (UNECE) y está dirigido por la escuela de negocios IESE, acaba de publicar el caso de estudio del proyecto acueducto El Realito (México) en el cual Aqualia tiene una participación principal.

El proyecto del acueducto fue diseñado para la conducción y potabilización de agua desde la presa El Realito (situada en el río Santa María, en el norte del estado mexicano de Guanajuato) hasta la zona metropolitana de San Luis Potosí (capital del estado homónimo). Tiene una capacidad de 1 m³/seg y su construcción permite incrementar los recursos disponibles de esta zona urbana en crecimiento, revertir la sobreexplotación de los acuíferos y eliminar sus efectos adversos sobre el medioambiente y la salud de los ciudadanos.

El contrato de El Realito, firmado en 2009 en modo financiación, construcción, operación y mantenimiento, y transferencia de infraestructura (DFBOMT, por sus siglas en inglés), contempla la elaboración del proyecto ejecutivo e ingeniería, financiación, construcción de 132 kilómetros de línea de conducción, 46 de caminos de acceso, 9 de líneas de transmisión, 1 planta potabilizadora con 1 m³/s de capacidad, 1 tanque de cambio de régimen, 3 plantas de bombeo y 6 tanques de recepción. Su operación y mantenimiento se mantendrá para un período de 23 años (que comenzó en 2015).

Según el informe recién publicado, el acueducto El Realito “es un buen proyecto desde el punto de vista del aprendizaje para otras administraciones y ofrece múltiples razones y argumentos que permiten señalar que las APP son un instrumento no solo útil, sino necesario para el desarrollo de infraestructuras de primer nivel al servicio de los ciudadanos”. Así, este proyecto tiene un impacto elevado en la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), principalmente en salud y bienestar (ODS 3), agua limpia y saneamiento (ODS 6), reducción de desigualdades (ODS 10), ciudades y comunidades sostenibles (ODS11), vida de ecosistemas terrestres (ODS 15) y alianzas para lograr los objetivos (ODS 17).

En materia de afección económica, es especialmente relevante que el acueducto El Realito, con una inversión de 152,73 millones de dólares, tuvo un impacto estimado en la economía mexicana de 232,13 millones de dólares, supuso un incremento a corto plazo del 0,02% del PIB nacional mejicano y fue capaz de crear casi 900 puestos de trabajo durante la fase de construcción y 70 empleos fijos durante los 23 años de la fase de operación. Además, la tarifa final que la Administración mejicana paga por la infraestructura y su operación (0,26 dólares/m3) convierte este proyecto en una infraestructura totalmente sostenible desde el punto de vista económico y social.

Asimismo, el proyecto El Realito, ha recibido numerosos premios, como el Water Deal of the Year (2012) concedido por la publicación especializada Global Water Intelligence, o el Latin American Water Deal of the Year otorgado por Euromoney en 2011.

Colaboración Aqualia - PPP for Cities

Este caso de estudio se deriva de la colaboración que Aqualia mantiene desde 2016 con el centro PPPs for Cities, iniciativa de Naciones Unidas, a través de su Comisión Regional UNECE y su programa "International Centre of Excellence on PPPs" (ICoE), que acoge en España la Escuela de Negocios IESE.

Dentro del proyecto, Aqualia lidera el área de Agua aportando su experiencia en los diversos grupos de trabajo y actividades que tienen por objetivo desarrollar acciones de investigación, innovación y apoyo a las administraciones de todo el mundo en la planificación, gestión y desarrollo de proyectos de asociación público-privadas (APP) en el entorno de las ciudades. Una labor crucial para el futuro de la sociedad, ya que se estima que en 2030 unos 5000 millones de personas se concentrarán en áreas urbanas, lo que supone un 60% de la población mundial.

El proyecto en régimen APP de la depuradora de New Cairo con capacidad para tratar las aguas residuales de más de 1 millón de habitantes fue el primer ejemplo de colaboración público-privada de agua objeto de estudio por parte del Centro “PPP for Cities” y contó también con la colaboración de Aqualia.