La Diputación Foral de Álava impulsa el compostaje y la implantación del quinto contenedor

La Diputación Foral de Álava promoverá la separación y gestión de los residuos orgánicos en todo el Territorio Histórico de Álava, mediante el impulso del compostaje o la implantación del contenedor marrón. “Es un buen ejemplo de economía circular, que nos permitirá ahorrar costes económicos y, sobre todo, medioambientales”, ha subrayado el diputado foral de Medio Ambiente y Urbanismo, Josean Galera, en la presentación del estudio.

Se trata de un estudio que ha sido analizado y debatido desde hace meses con las Cuadrillas y ayuntamientos alaveses, “cuyo interés e implicación” ha destacado Galera. Y es que, actualmente, casi el 52% de los residuos depositados en la fracción resto –o contenedor gris- son restos de alimentos y jardinería, es decir, podrían separarse para su posterior reciclaje y valorización. “Es una asignatura pendiente en el territorio, que esperamos comenzar a corregir en los próximos meses”, ha dicho el diputado.

Proceso participativo

El estudio presentado es el resultado de un proceso participativo con las Cuadrillas y ayuntamientos, que han analizado las alternativas posibles y seleccionado las más adecuadas a cada entidad. “El objetivo del estudio es alcanzar la gestión sostenible de los residuos orgánicos a nivel domiciliario a través de un sistema de recogida, fundamentalmente orientado a los domicilios particulares como principales generadores de residuos orgánicos, sin olvidar los grandes generadores, como comercios de alimentación, colegios o restaurantes”, ha resumido Josean Galera.

En concreto, el quinto contenedor o contenedor marrón ha sido el seleccionado para el 48% de las viviendas habitadas, seguido del compostaje en los hogares, tanto individual como comunitario (47%). Finalmente, un 4,5% utilizará la recogida neumática.

Comercios, restaurantes y colegios

Esta implantación no afectará sólo a los domicilios particulares, sino que se extenderá también a los comercios de alimentación, restaurantes, colegios y grandes superficies de los pueblos alaveses. En concreto, la mayoría de ellos podrán utilizar el sistema ‘puerta a puerta’ –o recogida particular-, y también el contenedor marrón.

Respecto a las inversiones necesarias para empezar con el sistema de recogida, se estima un coste de un millón de euros para su implantación del sistema. Si analizamos cada una de las alternativas, es el compostaje comunitario el que mayor inversión requiere, seguido del compostaje doméstico, el quinto contenedor, la recogida en contenedores de gran capacidad para restos de poda, la recogida neumática y la recogida ‘puerta a puerta’ para grandes generadores. “Me gusta más hablar de inversión que de gasto, ya que será muy notable el ahorro, tanto económico como medioambiental, que lograremos con la implantación de estas alternativas”, ha concluido Josean Galera.