
2025, un año decisivo para los gestores de residuos
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Si el 2024 ha estado marcado por la vorágine normativa europea al que han debido hacer frente los gestores de residuos, este 2025 no va a ser menos en cuanto al enorme esfuerzo de adaptación que deberá acometer la industria del reciclaje para cumplir con los numerosos reglamentos y directivas y sus correspondientes adaptaciones al ordenamiento jurídico de cada Estado miembro.
Partiendo de la legislación europea en materia de residuos, ya sabemos de la publicación del Reglamento de envases y residuos de envases, que será aplicable 18 meses a partir de la fecha de su entrada en vigor –20 días de su publicación en el Diario Oficial de la Unión Europea–.
Si el 2024 ha estado marcado por la vorágine normativa europea al que han debido hacer frente los gestores de residuos, este 2025 no va a ser menos en cuanto al enorme esfuerzo de adaptación que deberá acometer la industria del reciclaje.
Aunque habrá que analizar cuáles serán sus implicaciones para los gestores de este tipo de residuos y qué supondrá esta normativa para España, lo que si podemos adelantar es que dejará obsoleto o pendiente de no pocas modificaciones al Real Decreto 1055/2022 de envases y residuos de envases.
Otro Reglamento que se publicará este año, al llegar a la fase final de su tramitación, es el de vehículos al final de su vida útil (VFU). Antes de ello, FER trabajará en cada una de sus etapas legislativas defendiendo al sector. Una vez que entre en vigor, asistiremos a los cambios en la gestión de los VFU para los próximos años, clave para la renovación del parque móvil y la apuesta para el uso de materiales reciclados en la producción de nuevos vehículos, así como en el proceso de electrificación y una correcta gestión de los componentes de las baterías.
Por otro lado, también asistiremos a la modificación de la Directiva 2008/98/CE marco de residuos, centrada en los sectores de los alimentos y los textiles. FER ha prestado especial atención al sector de textiles y hemos trabajado para que en esta modificación se tenga en cuenta la igualdad de trato de todos los gestores de residuos textiles y la necesidad de autorización y/o permiso para operar como tales.
Además, hemos incidido en la necesidad de incluir a todos los productores de producto dentro del ámbito subjetivo de aplicación de la Directiva, en que todos los textiles descartados por los consumidores que sean recogidos deban ser considerados como residuos y en una mayor claridad en la regulación, dado que existe una deficiencia de definiciones legales y de especificaciones técnicas al respecto.
Otro documento fundamental para los gestores de residuos va a ser la futura Ley de Economía Circular, anunciado por la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, en sus orientaciones políticas 2024-2029, donde se establece que trabajar para descarbonizar la economía de la UE seguirá siendo una prioridad y parte del cambio continuo hacia un modelo de producción y consumo más sostenible que conserve el valor de los recursos en nuestra economía durante más tiempo.
Desde EuRIC se ha creado un primer documento de trabajo al respecto en donde se dan prioridad a las siguientes actuaciones: crear una demanda de materiales reciclados en el mercado; establecer objetivos circulares de uso y reciclado de materiales; reforzar y recompensar el reciclado; acelerar los procedimientos en el impulso de materiales reciclados; implementar una contratación pública circular; generar un mercado único de la UE para una economía circular competitiva; desarrollar criterios de fin de la condición de residuo para muchos más flujos de residuos a escala en la UE; evitar la competencia desleal, y equilibrar adecuadamente los principios de neutralidad climática y economía circular.
Novedades legislativas en España
En el ámbito estatal y autonómico, en este 2025 arrancará con la puesta en marcha de la plataforma electrónica de RAEE. Esta orden, que se ha demorado en varias ocasiones y de la que FER ha solicitado a lo largo de estos años cambios en su contenido –logrando algunas modificaciones–, no obstante, sigue siendo un instrumento complejo y poco realista en relación a los objetivos que persigue y así verá la luz.
Desde FER somos firmes defensores de la trazabilidad de los RAEE como herramienta para coartar las malas prácticas, de forma que el residuo se gestione por los cauces legales habilitados por la Administración, pero para ello se deben cumplir algunas premisas que esta plataforma no consigue: que sea sencilla la alimentación de datos; que todos los operadores obligados a usar la plataforma la usen y que no requiera de un escalado de fechas para algunos operadores como, por ejemplo, los puntos de recogida municipales o distribuidores, que la van a empezar a utilizar seis meses después de los gestores, o que las obligaciones de información a aportar por los gestores se simplifique, dado que otro gran problema de la plataforma es la individualización de la trazabilidad de los aparatos.
Desde FER somos firmes defensores de la trazabilidad de los RAEE como herramienta para coartar las malas prácticas, de forma que el residuo se gestione por los cauces legales habilitados por la Administración, pero para ello se deben cumplir algunas premisas que esta plataforma no consigue.
Otro punto importante que entra en vigor desde el primer día del año es la aplicación de la responsabilidad ampliada del productor (RAP) a todos los envases, según marca el Real Decreto 1055/2022, de 27 de diciembre, de envases y residuos de envases.
Desde FER hemos mantenido reuniones con todos los nuevos sistemas colectivos de responsabilidad ampliada del productor (SCRAP) de envases industriales y comerciales y hemos firmado acuerdos marco de colaboración con varios de ellos, además de preparar un cuadro comparativo con información de todos los nuevos SCRAP para facilitar la labor de los socios.
En línea con la legislación comunitaria, el pasado mes de septiembre concluyó la consulta pública previa del proyecto de Real Decreto sobre gestión de residuos textiles y calzado, por lo que es previsible que en 2025 se termine de tramitar y publicar.
La federación ha transmitido al Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITERD) la necesidad de incluir a todos los productores de producto –sin excluir a las microempresas, como prevé el texto inicial de la Comisión Europea–; la oposición a que se pueda exigir a los operadores de reutilización que aporten una contribución financiera al SCRAP; el fin de la condición de residuo, y la necesaria coordinación entre las entidades locales, los gestores y los SCRAP para cubrir los costes de gestión o los objetivos de contenido reciclado.
Por si todo este contenido legislativo no fuera bastante, a lo largo de este año es más que probable que se publique el nuevo Real Decreto sobre los neumáticos fuera de uso y la gestión ambiental de sus residuos, el nuevo Real Decreto sobre aceites industriales, el Real Decreto sobre pilas y baterías para adaptarlo al Reglamento 1542/2023, el nuevo Plan Estatal Marco de Gestión de Residuos, el Programa Estatal de Prevención de Residuos y el II Plan de Acción de Economía Circular.
La nueva normativa va a modificar sustancialmente la operativa diaria de las empresas del sector y, por tanto, es fundamental que se tenga en cuenta su idiosincrasia y la coyuntura de cada uno de los diferentes flujos de residuos a los que afectarán.
Desde la Federación Española de la Recuperación y el Reciclaje (FER) hemos intervenido en cada fase y hemos enviado comentarios y alegaciones a todas y cada una de las normativas que afectarán a los recicladores, conscientes de que todas ellas van a modificar sustancialmente la operativa diaria de las empresas del sector y que, por tanto, es fundamental que se tenga en cuenta su idiosincrasia y la coyuntura de cada uno de los diferentes flujos de residuos a los que afectarán, esperemos que para mejor.
Lo que ninguna normativa va a modificar en 2025 es la labor crucial que desarrollan las empresas recicladoras en favor de un desarrollo sostenible y que solo si se tienen en cuenta sus demandas y necesidades, será posible alcanzar la economía circular y la neutralidad climática en Europa.