Salvaterra do Miño se une al programa de compostaje doméstico de Sogama

El concello pontevedrés de Salvaterra do Miño ha formalizado su adhesión al programa de compostaje doméstico impulsado por la Sociedade Galega do Medio Ambiente, con el objetivo de avanzar hacia una gestión más eficiente de los residuos urbanos que le reporte beneficios ambientales, económicos y sociales.

La empresa pública enviará al concello 25 compostadores, con una capacidad de 340 litros cada uno, los cuales serán distribuidos entre los hogares previamente seleccionados por el mismo, y que en todo caso deben cumplir un requisito indispensable: disponer de huerta, jardín o tierras de cultivo donde utilizar el abono obtenido.

Sogama asumirá también la formación de los vecinos participantes, de manera que puedan llevar a cabo su labor con las mayores garantías. La instrucción se complementará con la entrega de diferentes materiales divulgativos tales como manuales de autocompostaje, en los que se explica de forma detallada el proceso de transformación de los restos orgánicos en compost, dando solución a las dudas más frecuentes y errores más comunes.

Si bien la Sociedad pública, a través de una asistencia técnica, llevará a cabo labores de asesoramiento externo, el seguimiento del proyecto correrá a cargo de personal al servicio del concello, que visitará las viviendas participantes para comprobar el trabajo realizado por los usuarios y garantizar con ello la obtención de un abono de alta calidad que cumpla con todos los requisitos impuestos por la normativa vigente, de forma que pueda aplicarse en la agricultura sin restricciones.

MENOS RESIDUOS Y MÁS AHORRO

Mediante su adscripción al programa liderado por Sogama, el ayuntamiento pretende obtener interesantes beneficios ambientales con la transformación en compost de la materia orgánica que generan las viviendas unifamiliares, cerrando de esta forma el ciclo de aprovechamiento de la misma, al tiempo que se obtiene un fertilizante natural con excelentes propiedades para su empleo en la agricultura.

Uno de los principales objetivos de este programa consiste en que los entes locales puedan disminuir la frecuencia de recogida de la basura domiciliaria y, por tanto, el transporte de la misma a las plantas de transferencia distribuidas por el conjunto del territorio gallego, minimizando de forma paralela las emisiones de CO2.

Desde el punto de vista económico, cabe destacar la importante reducción en la factura que el ayuntamiento habrá de abonar a Sogama, puesto que al reciclar en origen la fracción orgánica, que representa alrededor del 42 por ciento del total de los desechos domésticos, se evita su depósito en los contenedores verdes convencionales y su posterior tratamiento en el complejo medioambiental de Cerceda.

Desde la dimensión social, las ventajas tampoco son desdeñables, ya que se recupera una ancestral tradición en el rural gallego como es la separación de los restos orgánicos para la elaboración de compost y/o alimento del ganado, cerrando así el ciclo de reciclaje en el propio domicilio. Además, este tratamiento conlleva la reducción del número de desplazamientos a los contenedores de recogida selectiva, por lo general distanciados de las viviendas debido a la alta dispersión de la población, lo cual es especialmente importante habida cuenta del acusado envejecimiento de la población.

A lo largo y ancho de toda la comunidad gallega, ya son más de cien los municipios que han decidido formar parte del programa de autocompostaje de Sogama. Y son más de 4.800 los compostadores que la sociedad pública medioambiental ha distribuido entre los participantes en esta iniciativa, a la que también se han sumado centros escolares y colectivos sociales.

Pero lejos de conformarse con estos alentadores resultados, el objetivo de Sogama, de cara a los próximos meses, es engrosar esta cifra para que cada vez sean más las familias incorporadas a este sistema, del que derivan múltiples e innegables ventajas y beneficios.