ASAGUA denuncia el estancamiento de la inversión en agua y reclama un pacto nacional urgente

La Asociación Española de Empresas de Tecnologías del Agua (ASAGUA) ha celebrado su Asamblea Anual 2025 alertando sobre la falta de avances en los principales problemas del sector. Las compañías advierten que la situación es crítica y que, desde 2007, el ciclo urbano del agua acumula un déficit de 35.000 millones de euros.

La inversión estatal sigue siendo insuficiente, errática y poco sostenible. Incluso cuando se programan partidas, el nivel de ejecución rara vez alcanza el 100%. En algunos ejercicios, la ejecución ni siquiera llega al 50%, lo que refleja un problema estructural en la gestión.

Planes incumplidos y promesas recurrentes

Una parte significativa de las actuaciones incluidas en los Presupuestos Generales del Estado se repite año tras año sin llegar a licitarse. Esta práctica evidencia, según ASAGUA, la falta de compromiso del Ejecutivo y de los responsables políticos, quienes, pese a reconocer la importancia del agua, mantienen al sector en el abandono.

Los planes hidrológicos de cuenca tampoco se ejecutan en su totalidad. En los de segundo ciclo, la propia administración reconoció que la ejecución no superó el 50%. Esta situación resulta inaceptable en un contexto de fenómenos climáticos extremos, como sequías y danas, que hacen más urgente la acción.

La necesidad de un pacto nacional por el agua

ASAGUA insiste en que el país necesita un pacto nacional por el agua que se traduzca en un plan hidrológico nacional, basado en criterios científicos y técnicos, y diseñado por especialistas conocedores del sector, alejados de intereses políticos.

La asociación reclama que este plan incluya inversiones reales, suficientes y vinculantes, ajustadas a las necesidades actuales. “Hoy, más que nunca, es obligatorio alcanzar un pacto nacional por el agua que derive en el plan hidrológico nacional”, advierten desde ASAGUA.

Contratación pública: un modelo desfasado

El sector denuncia que la regulación actual de la contratación dificulta la gestión. La idea de que “lo más barato es lo mejor” ha derivado en proyectos de baja calidad, mientras que la revisión de precios prácticamente ha desaparecido. Esta situación convierte la contratación en un riesgo para los empresarios, que son, en última instancia, colaboradores necesarios de las administraciones públicas.

A esta problemática se suma la insuficiencia de fondos. Con el déficit de 35.000 millones de euros, ni los presupuestos estatales, ni los planes de cuenca, ni los fondos europeos de recuperación alcanzan la magnitud requerida. ASAGUA propone reforzar la colaboración público-privada, con una regulación clara y la modificación de la Ley de Desindexación y su reglamento.

Para impulsar la confianza y la eficacia en la gestión, la asociación reclama que cada año, en el primer trimestre, las administraciones publiquen el programa de actuaciones previsto. Esta medida aumentaría la transparencia y permitiría a las empresas planificar adecuadamente sus actividades.

El reto municipal: más de 8.000 ayuntamientos responsables

Desde la Ley 24/2014 de Racionalización y Sostenibilidad de la Administración Local, las competencias del ciclo urbano del agua recaen en los entes locales. Esto significa que más de 8.000 ayuntamientos españoles tienen la responsabilidad en la materia.

El problema radica en que solo las grandes ciudades disponen de los recursos suficientes para cumplir con estas obligaciones. En muchos municipios pequeños, la falta de medios provoca que infraestructuras básicas, como las depuradoras, permanezcan sin funcionar.