Restaurar el 15% de los ecosistemas degradados puede evitar la desaparición de un 60% de especies
- 1941 lecturas
El 75 % de la superficie terrestre no cubierta de hielo ha sido transformada por el ser humano, desde inicios de la revolución industrial. Un cambio sin precedentes en la historia que muestra que conservar ya no es suficiente para detener la rápida degradación de los ecosistemas. Por ello, en el Día Mundial del Medio Ambiente, que marca el inicio del Decenio de las Naciones Unidas sobre la Restauración de los Ecosistemas, WWF pide a la Unión Europea y a las administraciones españolas que se comprometan a restaurar, al menos, el 15% de la superficie terrestre y el 15% de la superficie marina.
La humanidad tiene por delante 10 años que son clave para ser capaz de regenerar espacios clave de la naturaleza y revertir su imparable degradación, especialmente intensa a partir de los años setenta. Por ejemplo, la intensificación de la agricultura, la ganadería y la expansión de infraestructuras han arrasado en 13 años más de 43 millones de hectáreas de bosque, una superficie equivalente a Marruecos. La mayoría de los océanos están contaminados, y más del 85% de los humedales se han perdido, de acuerdo a un estudio de WWF.
La naturaleza necesita un ‘salvavidas’, y la restauración es una de las piezas claves para ayudar a sanar una naturaleza herida y frenar los efectos del cambio climático. Restaurar el 15% de los ecosistemas degradados en los lugares adecuados puede prevenir el 60% de las extinciones de especies previstas, según un estudio publicado en la revista Nature. Y tiene el potencial de aumentar la seguridad alimentaria para 1.300 millones de personas. Pero, además, hay una estrecha conexión entre la recuperación de espacios naturales y el bienestar humano. Según un estudio, pasar dos horas a la semana en contacto con la naturaleza tiene beneficios para la salud y la calidad de vida.
En la actualidad, la UE está trabajando en una nueva legislación europea sobre restauración para cumplir con la Estrategia europea de Biodiversidad 2030, uno de los pilares centrales del Pacto Verde Europeo. “La restauración ecológica cobra una importancia crucial durante esta década y su éxito marcará enormemente la forma en que revertimos nuestro impacto sobre la naturaleza. Por ello, desde WWF pedimos a la Comisión Europea y al Gobierno de España, junto con las comunidades autónomas, que se comprometan a restaurar en esta década, al menos, el 15% de la superficie terrestre y el 15% de la superficie marina nacional”, afirma Enrique Segovia, director de conservación de WWF España.
Y añade: “Es fundamental que el Gobierno y las comunidades autónomas prioricen y planifiquen la restauración de aquellos ecosistemas clave que contribuyan a recuperar nuestra biodiversidad y que provean de mayores beneficios a la sociedad, como bosques de ribera, humedales, sistemas litorales degradados y zonas forestales de valor”.
WWF España lleva más de una década realizando proyectos de restauración en áreas naturales emblemáticas. Entre ellos destaca el trabajo para recuperar el bosque incendiado en el Espacio Natural de Doñana. Tras el incendio en junio de 2017, ardieron más de 10.300 hectáreas de áreas naturales; desde entonces, WWF en colaboración con la Junta de Andalucía, ha recuperado hasta ahora 7,5 hectáreas de terreno introduciendo alrededor de 3.000 plantones de especies autóctonas.
Además, en el Estuario del Guadalquivir, la organización ha restaurado seis hectáreas en la marisma de Trebujena, donde ya están nidificando numerosas especies de aves.
También, desde 2011 WWF está contribuyendo a recuperar Las Tablas de Daimiel con la restauración de 283 hectáreas y la introducción de cerca de 55.000 plantones de especies autóctonas. Mientras, en Valencia lidera esfuerzos para recuperar 125 hectáreas del bosque Muela de Cortes y el Caroig, incendiado en 2012. Y, por último, trabaja en Madrid para regenerar el bosque de ribera del Parque Regional del Sureste, donde ya se han recuperado 15 hectáreas y se han plantado más de 9.000 plantones de especies autóctonas.