Transitar hacia una economía circular puede suponer un desafío para el sur global

El proyecto europeo JUST2CE, con participación de la UAB, ha investigado los factores que pueden facilitar o dificultar una transición hacia la economía circular que sea tanto socialmente justa como ambientalmente beneficiosa

Desde los desafíos para implementar estrategias de economía circular en cadenas de suministro complejas, como en la industria pesquera de Galicia, hasta el comercio de residuos electrónicos en Ghana, pasando por la promoción de prácticas agrícolas regenerativas en Sudáfrica e iniciativas de la sociedad civil para transformar la economía de Taranto, Italia, centrada en la fabricación de acero. Estos son algunos de los casos de estudio analizados por 14 universidades, centros de investigación y organizaciones no gubernamentales de nueve países dentro del proyecto JUST2CE, financiado por el programa europeo Horizonte 2020 y recientemente seleccionado por la Unión Europea como caso de éxito de este programa.

Liderado por el investigador de la UAB Mario Pansera, en colaboración con la Universidad de Vigo, donde dirige el Post-Growth Innovation Lab, el proyecto analiza los factores que pueden facilitar o dificultar la transición hacia una economía que no solo impulse la sostenibilidad ambiental, sino que también garantice justicia social.

 

El estudio ha combinado diez casos de análisis en Europa y África con el desarrollo de modelos macroeconómicos, cuestionando la idea de que la economía circular pueda ofrecer soluciones en las que todos ganen, según destaca Pansera

 

Una de las principales conclusiones es que el desarrollo de la economía circular en el Norte Global podría generar impactos negativos en los países del Sur Global. Para una transición equitativa, es fundamental desarrollar modelos macroeconómicos que permitan evaluar los efectos de determinadas políticas sobre las cadenas de valor globales.

Junto a la Universidad de Vigo y la Universitat Autònoma de Barcelona, en este proyecto han participado la Universidad de Sheffield, la Universidad de Nápoles Federico II, la Universidad de Leeds, la Universidad de Coímbra, la Universidad de Ciudad del Cabo y la Universidad de Mekele (Etiopía), así como la Agencia de Residuos de Cataluña, el Centro de Investigación y Desarrollo Científico e Industrial de Zimbabue y las organizaciones Kumasi Hive y Red de Economía Circular Africana.

 

Libro electrónico y documental

Los resultados del proyecto se han recopilado en el libro electrónico Circular Economy for Social Transformation: Multiple Paths to Achieve Circularity, que ofrece una visión integral sobre los desafíos, barreras y aspectos críticos en la transición hacia una economía circular justa. Entre sus principales conclusiones, se señala que el modelo actual de economía circular dominante no permite conciliar los objetivos sociales y medioambientales, resaltando las limitaciones de una visión reduccionista centrada en la gestión de residuos y el reciclaje. La economía circular, según los responsables del proyecto, es un concepto mucho más amplio que abarca todo el sistema socioecológico, desde la producción hasta el consumo. Por ello, las políticas transformadoras deben considerar factores específicos de cada territorio para fortalecer a las comunidades locales.

El proyecto también ha explorado iniciativas y problemáticas concretas en Europa y África. Cuatro de estos casos de estudio se presentan en el documental JUST2CE: Four Stories of Circular Economy, que expone proyectos de economía circular, como los desarrollados en Taranto, y estrategias de recuperación económica rural, como las implementadas por la cooperativa Minga en Montemor-O-Novo, Portugal. Además, la película aborda el comercio de residuos electrónicos a través del mercado de Kumasi, en Ghana, y analiza los efectos del cambio climático en la agricultura, destacando la experiencia de la granja Lowerland en Sudáfrica.

Newsletter

La información más relevante en tu correo.

Suscribirme

Último número